Pekín, 7 ago (EFE).- Cientos de aficionados, algunos con ramos de flores, dieron en el aeropuerto de Pekín una calurosa bienvenida al equipo de natación chino que compitió en Londres 2012, especialmente a los dobles campeones Sun Yang y Ye Shiwen, dos de las principales estrellas en los Juegos Olímpicos.
Sun Yang, que repitió en Londres la excepcional actuación de los Mundiales de Shanghái 2011 (dos oros, una plata y un bronce) también tuvo palabras de agradecimiento a los aficionados por haber «perdido el sueño» (debido a la diferencia horaria, en China las finales de natación fueron de madrugada).
Ye, una de las grandes protagonistas de Londres 2012 en los primeros días de competición, fue preguntada por la polémica de las acusaciones de dopaje, y señaló que la experiencia le «dio una lección» y ahora es «más madura, pero no le ha afectado demasiado.
Las palabras de la joven nadadora de Hangzhou (la misma ciudad natal de Sun) llegan cuando en China ha causado gran revuelo un artículo de la revista científica «Nature» que ha vuelto a extender sospechas sobre los buenos resultados de Ye.
Científicos chinos han criticado la falta de rigor de ese artículo, señaló la agencia Xinhua, y la misma revista ha pedido disculpas a los lectores chinos «si ha dado la impresión» de que apoyaban «falsas acusaciones contra ella».
Con cinco oros (los mencionados más el de Jiao Liuyang en los 200 metros espalda femeninos, también récord olímpico), dos platas y tres bronces, China ha cosechado su mejor actuación en las piscinas olímpicas de la historia, y ha conseguido además sus primeros oros en categoría masculina.
China recoge así frutos de la experiencia de haber organizado el pasado año los Mundiales de Shanghái, en los que Sun, Ye y Jiao ya despuntaron.
En el medallero de la natación China acabó en segundo lugar, sólo por detrás de Estados Unidos (aunque a una distancia sideral, con 16 oros), pero por encima de otros países con gran tradición nadadora como Australia, Sudáfrica, Japón, Holanda, Francia o Corea del Sur. EFE